El gas radón es un gas noble que en su forma gaseosa es incoloro (no tiene color), inodoro (no tiene olor) e insípido (no tiene sabor). En su forma sólida es de color rojizo. Tiene el número 86 en la tabla periódica y su símbolo es Rn. Es de origen natural y se produce a partir de la desintegración radiactiva natural del uranio, elemento que está presente en suelos y rocas.
El gas radón tiende a concentrarse en los interiores de los edificios como viviendas, escuelas y lugares de trabajo, por ello es importante acudir a profesionales que sepan cómo detectar gas radón en mi casa ya que es uno de los principales causantes del cáncer de pulmón después del tabaco, con una estimación de entre un 3% y un 14%.
Varía mucho las zonas en las que podemos encontrar mayor exposición a este gas, en el siguiente mapa nos hacemos una idea de la incidencia que tiene la acumulación de este gas en España:
Para detectar el gas radón debemos acudir a profesionales, que harán una prueba en esta casa cuyo procedimiento consiste en lo siguiente:
Acudirán a la zona más baja de la casa ya que el gas radón proviene en su mayoría de debajo de la tierra y utilizarán material técnico concreto para determinar el grado de acumulación de este gas. Con los resultados obtenidos se abre una fase de estudio y análisis y si se considera peligroso también disponen de acciones para erradicar o por lo menos mitigar la acumulación de este gas, así como estudiar cuales son los puntos débiles de la estructura que permiten el acceso del gas a la casa.
No debemos alarmarnos en exceso porque no suele ser habitual que el grado de concentración sea grande, pero todos sabemos que es mejor prevenir que lamentar, así que no dejes de consultar con profesionales si tu vivienda o lugar de trabajo es susceptible de ser atacado por el gas radón y por lo tanto de contratar una prueba de medición para curarse en salud.
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