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Siempre tuve claro que hay ciertas cosas que son para el ámbito privado. Pero mi sorpresa es de tal magnitud ante comentarios que leo en redes sociales, que me he decidido a publicar mi experiencia con la infección por covid-19. Si contándola consigo ayudar a alguna persona me daré por satisfecho.

Lo primero que os tengo que decir, aunque parezca increíble, es que la enfermedad existe. Para todos los incrédulos, que no sé si por mecanismo de defensa o hastío por tanta restricción, hacen comentarios absurdos, la enfermedad existe y puede manifestarse de muy diferentes formas. Básicamente yo distingo 4:

  • Asintomático o casi sin síntomas
  • Síntomas leves o sin gravedad
  • Varios síntomas (sobre todo fiebre durante varios días) que derivan en neumonía y hospitalización
  • Neumonía grave con necesidad de entubado y control en uci

Evitar el contagio

La mascarilla bien usada es fundamental. En mi entorno, sospechamos que me contagié por un contacto directo de un positivo que se olvidó de comunicar dicho contacto. Cuánto estrés nos habría ahorrado si en la llamada de su rastreador hubiese dicho que había cenado sin mascarilla con la persona que me contagió a mi (con la que a su vez yo comí y compartí, por lo tanto, un tiempo sin mascarilla). Sin embargo, son cosas que están pasando a diario y en realidad son evitables si hacemos un uso correcto de la mascarilla. A mi juicio el gran peligro de contagio se produce cuando:

  • Compartimos tiempo con un no conviviente sin mascarilla. Comer o tomar algo en una casa, en un bar, etc.
  • Sentarnos enfrentados multiplica las posibilidades.
  • No cambiar la mascarilla y hacer un mal uso de ella es matador. Y os recomiendo la FFP2 para proteger al resto pero también a vosotros mismos. Es más incómoda sí, pero vale la pena si evitas pasar un calvario.

Por lo tanto, imaginaros que vais a comer con vuestros padres. Os recomiendo que lo hagáis por turnos. Primero comed vosotros y tus padres que se mantengan alejados (aunque estén en la misma mesa) y con mascarilla. Y en una posición diagonal, nunca enfrentados. Después os ponéis vosotros la mascarilla y que coman ellos. Estaréis compartiendo mesa pero minimizando riesgos. Importantísimo!!!

Ya contagiado, qué debo vigilar

Si a pesar de todo resulta que das positivo en covid-19 lo primero que tienes que hacer es proveerte de lo siguiente:

  • Un termómetro para tomar la temperatura en la axila, nunca en la frente: Cuando me hospitalizaron la persona de la ambulancia me tomó la temperatura al llegar al Chuac, con un termómetro de frente: 36,8. Tres minutos más tarde, la médico me tomaba la temperatura ya en el box donde me estaban reconociendo con un termómetro normal en la axila: 39,2. Por mi experiencia la fiebre del covid no se manifestó en la frente y es engañoso, así que para asegurar temperatura siempre en la axila.
  • Un pulsioxímetro para medir la saturación de oxígeno en sangre. Este aparatito te ayudará a valorar si debes llamar a una ambulancia o no. La combinación de varios días con episodios de fiebre sumada a una baja saturación (por debajo de 95) es un síntoma inequívoco que indica que debes pedir a tu médico que te envíe una ambulancia. En mi caso fueron 6 días de fiebre, llegando a topes de 39,3 una o dos veces al día y una saturación cercana a 90. No debes esperar tantos días como esperó mi médico. Exígele tú mismo que te pida una ambulancia. Si al final no necesitas ingreso mejor que mejor, pero no dudes.
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  • En caso de desarrollar neumonía hay de 7 a 10 días desde que aparecen los primeros síntomas que son cruciales y peligrosos. Durante ese tiempo te dejarán ingresado con oxígeno y vigilando. Porque tienen estudios que demuestran que es el intervalo de tiempo en el que la cosa puede ir a más, requiriendo incluso entubado e ingreso en UCI.

En total llevo más de 14 días de recuperación en las que he pasado por una experiencia realmente dura. He perdido 7 Kgs de masa muscular y todavía hoy me agoto en cuanto doy tres pasos. Ya veo la luz, por fin, pero repito que la experiencia ha sido muy dura para mi y para mi familia, a la que agradezco de todo corazón todo el apoyo que me han brindado.

También quiero destacar el apoyo que mi empresa me ha demostrado. Mis jefes y mis compañeros se han volcado y me han facilitado este trámite al 100% lo cual les agradezco muchísimo.

Y por supuesto quiero deshacerme en elogios y halagos a todo el personal del Chuac que me trató. A pesar de las duras condiciones de trabajo que tienen ha sido algo maravilloso ver que estamos en manos de profesionales tan entregados y tan eficientes. Me estallan los ojos en lágrimas cada vez que me viene la cara de cualquiera de las enfermeras a la cabeza, con su empatía, cariño y dedicación que me ayudó, qué digo me ayudó, me salvó la vida. Gracias, gracias y mil veces gracias, os lo merecéis todo.

Por último un recuerdo a mi compañero de habitación «Jose», que gracias a Dios y a pesar de haber necesitado entubado y seis días en UCI salió adelante y evolucionaba muy bien cuando a mi me dieron el alta hospitalaria. Fue muy emocionante despedirme de él, gran persona!!!

Ahora no soporto ver conductas o comentarios fuera de lugar con todo este tema. No voy a hacer de policía de barrio tampoco, porque siempre te puedes equivocar, pero por favor, no seas tú el tonto del barrio y usa mascarilla y protege a tus iguales.

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